MB 35- DRH
MANBLAS N° 35- Documentos de Revisión Histórica
Gral. Juan Lavalle, comandante de las tropas de las Provincias Unidas del Sud participantes de la Batalla de Pichincha (1822)
AMÉRICA LATINA SIN FRONTERAS INTERIORES
DURANTE
SU EMANCIPACIÓN
EN EL SIGLO XIX
Pacho
Nazar y Andrea Marín
ELABORADO A PARTIR DE: Barros
Arana, D.; 1962.
Historia de América. Ed. Futuro
S.R.L. Buenos Aires, E INFORMACIÓN PERSONAL DE LOS AUTORES.
El 17 de agosto en Argentina es la efeméride
del fallecimiento del Gral. José de San Martín.
En el centésimo quincuagésimo cuarto
aniversario de su desaparición, resulta de interés exaltar su espíritu
latinoamericanista; coincidente con el de próceres de su generación.
Las historias oficiales de los países de
America Latina se han esmerado en desdibujar los antecedentes, que hicieron de
su emancipación una gesta única, libre de localismos y egocentrismos, con el
vigor de una Gran Nación entre el Río Grande, Méjico y el Cabo de Hornos,
Argentina.
El imperialismo inglés socavó desde sus
nacientes los cimientos de aquella Gran Nación. Su heredero y aliado histórico,
el imperialismo estadounidense, acompañó fielmente aquella estrategia
disociadora y neocolonialista.
Del otro lado de los
Andes
Pocos actos históricos muestran al Gral. San Martín latinoamericanista como las campañas, que lideró en Chile y en Perú.
Tropas argentinas y chilenas combatieron por
igual, tanto en Chacabuco como en Maipú; bajo el mando de San Martín como
de Bernardo O´Higgins.
Los comandantes de uno y otro país,
indistintamente, supieron organizar colectivamente a sus pueblos para los
esfuerzos pecuniarios, exigidos por las luchas independentistas.
Las tropas y los buques, preparados en Chile
para la campaña del Perú, contaron con recursos económicos gestionados por
O´Higgins. 6.000 soldados chilenos y 24 buques de igual bandera integraron, con
tropas argentinas, la expedición.
Por la Causa sin
Imperios
Entre los hombres de la generación de San Martín, no faltaron europeos, que supieron comprender y abrazar la causa libertadora.
Un militar inglés, muy alejado de la línea
colonialista del imperio homónimo, Tomas
Cochrane, comandó la escuadra y tropas binacionales, que zarparon del Pto. de Valparaíso en 1820 rumbo a Perú.
Un militar español, contrario al imperio de su
país natal, el Gral. José Antonio
Álvarez de Arenales comandó una campaña por los valles interserranos
peruanos, luego del desembarco en 1820, bajo las órdenes de San Martín. Fue
victorioso en las batallas de Nazca
(1820), al sudeste de Lima y Pasco (1820),
al noreste de la misma Capital.
Un Argentino al mando
del Perú Independizado
Tras el desembarco de las tropas binacionales en el Pto. de Paracas, Perú, el Gral. San Martín operó un par de movimientos tácticos de las mismas; a fin de eludir eventuales ataques enemigos.
Apoyado en la exitosa campaña de Arenales y en
el fortalecimiento de Cochrane en el Pto. de El Callao, San Martín tomó la
capital del Perú y promovió su Independencia, que fue declarada el 28 de
julio de 1821.
De inmediato San Martín fue investido de la máxima
autoridad política y militar bajo el título de PROTECTOR DEL PERÚ; cargo que
detentó durante un año, hasta poco después de la Conferencia de Guayaquil.
Guayaquil: Sudamérica
Unificada
Deliberaron durante dos días los máximos conductores de ejércitos y pueblos mancomunados hacia la liberación de todos los territorios sudamericanos de habla hispana: 26 y 27 de julio de 1822 en Guayaquil, poco mas adelante y hasta hoy, Ecuador.
Las tropas venezolanas, colombianas, peruanas,
bolivianas, chilenas y argentinas quedaron bajo el comando militar unificado de
la correspondiente Nación Sudamericana.
Más importante que la persona encargada de
comandarlas fue el hecho de la unificación de las fuerzas armadas de
Sudamérica.
Sugestivamente, el mismo año 1822 el Presidente de un naciente
imperio, que se haría cargo del neocolonialismo en el resto de América, en el
Lejano Oriente y en Oriente Medio, anunciaba ante el Senado el propósito
dominador de pueblos y voluntades; conocido históricamente como Doctrina Monroe.
Oficiales argentinos, bolivianos, venezolanos y
chilenos combatieron bajo la comandancia general de Simón Bolívar, caraqueño, venezolano; luego de Guayaquil, en que
San Martín le delegó el mando de las tropas argentino-chilenas hasta el fin de
la campaña libertadora.
Entre otros, el Gral. argentino Rudecindo Alvarado estuvo a cargo de la
plaza del Pto. de El Callao en 1823 y 1824, tras haber combatido en el sudeste
peruano y el chileno Gral. Francisco Antonio
Pinto comandó tropas en 1823, que habían arribado al Perú con la escuadra
argentino-chilena.
Un Venezolano Preside
Bolivia.
Antonio José de Sucre, nacido en Cumaná, Venezuela, ha sido quizás el más destacado exponente de concepción y acción latinoamericanistas.
General, lugarteniente de Bolívar, comandó la Batalla de Pichincha (1822), que dio
libertad a Ecuador; dirigió brillante y exitosamente el Combate de Ayacucho (1824), último enfrentamiento sudamericano-hispano
de la etapa emancipadora y presidió Bolivia entre 1826 y 1828.
Tras hacer capitular al ejército realista
definitivamente en Ayacucho, Sucre le
ofreció el traslado a Europa con costo a la Sudamérica independiente.
Un Boliviano Preside
Perú
Andrés de Santa Cruz, general boliviano, combatió en el
Alto Perú entre el desembarco argentino-chileno (1820) y Ayacucho (1824), presidió el Perú entre 1826 y 1827 e impulsó el
único acto confederativo plasmado hasta ahora en la histórica latinoamericana:
la Confederación Peruano-Boliviana.
La Historia Acechanza
Imperial
Enterada Inglaterra de la irreversible
Independencia Hispanoamericana, su canciller Jorge Canning declaró: “Hispanoamérica es libre y si sentamos
rectamente nuestros negocios, ella será inglesa.”
Emancipación o
Neocolonialismo
Asentada en los antecedentes independistas
latinoamericanos, cabe la futura integración en tiempos más cortos que lo que
hizo la Europa a finales del siglo XX.
Será un factor de acercamiento horizontal la deuda
externa común de sus naciones.
Agentes de cohesión y unidad serán una fecha
acordada de unificación, un himno latinoamericano, una moneda única y una
bandera.
Desde este aniversario sanmartiniano, en que
participamos modestamente en 2 escuelas secundarias (1 de Plottier y 1 de
Neuquén Cap.), Departamento Confluencia, Provincia del Neuquén, Patagonia
Argentina, hacemos pública la propuesta de bregar, impulsar y militar por una
Confederación Latinoamericana de Naciones.
Plottier,
agosto de 2004
Queda
hecho el depósito que marca la Ley argentina 11.723/33, sus modificatorias y
decretos reglamentarios.
Toda transcripción puede hacerse citando la fuente.
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